Andorra, la belleza escondida en la altura de los Pirineos

El Principado de Andorra, con sus 85.000 habitantes, es el sexto país más pequeño de Europa. Su capital, Andorra la Vella, está situada en lo alto de los Pirineos, entre las montañas del Val de Nord y Val del Oriente a 1.023 metros sobre el nivel del mar, lo que la convierte en la capital europea más alta. Andorra recibe más de 10 millones de turistas al año y, debido al hecho de que ha estado aislado durante mucho tiempo debido a su posición geográfica, el porcentaje más alto de vturistas proviene de España, especialmente Cataluña, Francia y Portugal. Hay varias razones para este gran número de turistas en Andorra: sus pistas de esquí, el centro de bienestar llamado Caldea y el IVA bajo.

Hemos estado pensando en visitar Andorra durante mucho tiempo porque es un sitio ideal para pasar un fin de semana, tanto en invierno como en verano. Andorra está situada a unos 215 km de Barcelona y autobuses para Andorra salen cada hora desde la Estació del Nord.  Allí se llega en tres hora lo que la convierte en un sitio ideal para pasar un fin de semana, caminar por la capital, relajarse en el centro de spa y visitar algunos de los muchos centros comerciales ubicados en su centro. Si visitáis Andorra en temporada baja, podéis hacer reserva en hoteles a precios muy asequibles y muchos hoteles incluso ofrecen descuentos para Caldea. Nos alojamos en la parte nueva de la ciudad, en el hotel Tudel, en la calle principal Carlemany, muy cerca de Caldea.
Hemos llegado a Andorra después de tres horas de viaje bastante desagradable a través de una carretera con muchas curvas. El sábado pasó rápidamente, a pesar de la fuerte lluvia que nos siguió todo el tiempo. Visitamos el casco antiguo y la calle principal Carlemany (Charlemagne), llena de gente que, como nosotros, han venido aquí para pasar el fin de semana. Como ya he mencionado, Andorra está situada en un valle entre las montañas de Val de Nord y Val del Orient y consiste del casco antiguo y la parte nueva de la ciudad con la calle principal Carlemany en su centro, y todos los sitios importantes en la ciudad están situados a lo largo de esta calle. Seamos sinceros, Andorra no es un lugar donde venimos a visitar museos y monumentos, es un lugar en las montañas donde se puede disfrutar del esquí, la naturaleza hermosa y la visita a su centro de bienestar y centros comerciales. Aunque no hay muchas atracciones allí, me gustó mucho el casco antiguo, las casas de montaña típicas y edificios de piedra con techos de madera. Me gustó mucho más su paz y pequeñas calles estrechas que la calle principal Carlemany, llena de gente y el ruido.

Me sorprendió mucho la naturaleza preciosa de Andorra en perfecta armonía con la arquitectura de la ciudad y imagino que en invierno debe parecerse a un lugar de cuentos de hadas. Visitamos muchas tiendas en la calle Carlemany, buscando una cámara de fotos, y nos sorprendió la diferencia de precios entre España y Andorra y también la diferencia de precios entre las mismas tiendas de la ciudad. Hay muchas tiendas que venden cámaras de fotos y cada vendedor os dirá un precio diferente y intentará convenceros que ellos ofrecen las mejores condiciones, la garantía más larga, así como los mejores accesorios a precios más bajos. Tendréis la impresión que estáis en un enorme mercadillo donde todo el mundo intentará convenceros de comprar algo. En algunas tiendas también intentarán engañaros si estáis pagando con tarjeta de crédito, os cobrarán más explicando que la razón es que Andorra no está en la Unión Europea. Esto, por supuesto, no es el caso de todos los vendedores, por lo que debéis tener cuidado donde compráis. Me quedé bastante sorprendida por el número de tiendas que venden perfumes en la calle principal a precios mucho más bajos en relación con España y especialmente Francia.

Pasamos todo el día paseando así que decidimos relajarnos por la noche en el centro de bienestar Caldea porque todo el mundo hablaba tanto sobre este centro. Llegar a Andorra y no ir allí no era la opción. A nosotros nos han regalado las entradas, pero las podéis comprar en el sitio web de Caldea, y las entradas para 3 horas en Caldea cuestan 35 euros por persona. Caldea es muy bonita, tiene una gran piscina con varios jacuzzis redondos, una piscina al aire libre desde donde se puede disfrutar de la vista de las montañas, un baño romano, y una sauna. Tengo que admitir que aunque es muy bonito, cuando estuvimos allí, había mucha gente y era imposible relajarse y disfrutar. Los jacuzzis estaban llenos, hubo muchísima gente y el baño romano estaba lleno de gente que hablaba a voz alta. Creo que si vais allí durante la semana o por la mañana, no habrá tanta gente y disfrutaréis más. Nuestra visita a Caldea no fue como esperamos.

Pasamos el domingo entero paseando por la ciudad porque, el cielo estaba despejado y todo parecía mucho más bonito. Hemos visitado el casco antiguo y pudimos visitar todo una vez más, hacer un montón de fotos y conocer realmente la capital de Andorra.Nos encantó tanto que queremos ver cómo es cuando está cubierta de nieve, y espero que podréis leer sobre nuestras experiencias en las pistas de esquí de Andorra pronto. En conclusión, nos gustó Andorra como un destino de fin de semana, ya que se puede llegar relativamente rápido, tiene mucho que ofrecer y se puede visitar en el invierno y el verano.